SONES PARA VENCER

 

Sones para vencer

Eran miles, decenas de miles, los que se habían podido escabullir para reunirse en aquel lugar. Autobuses, camiones, trailers con sus plataformas repletas de gigantescos altavoces, generadores eléctricos, y con el exorbitante número de instrumentos musicales en manos de aquellos entregados y sacrificados humanos. Todo parecía ser el festival Rock más grande de la historia, pero aquello no era esta vez para diversión, era para morir rindiendo tributo a la humanidad, y hechos a la idea, avanzaron hacia su destino, asomando esta tropa de sacrificados por el horizonte allá en lo alto de aquella colina.

Sonaban entonces..., estridentes y acompasados tañidos de miles de viejas guitarras heavy metal, con un escalofriante y convulsivo sonar que imponía un poderío sobrecogedor, acompañadas de atronadoras baterías redoblando al son, tal como truenos de tormentas amenazadoras, mientras algunas voces profundas, guturales, y muy graves, con eco al unísono, se desgañitaban cantando ancestrales historias y leyendas épicas de la humanidad, contrastando con otras voces estridentes y muy agudas que estremecían profundamente. Todos iban pintados, caracterizados, sus caras, sus cuerpos, y con provocadores atrezos, al modo Alice Cooper, Kiss, Marilyn Manson, etc, y además, muchos al estilo Lordi, transformados en criaturas monstruosas. La máxima expresión del heavy duro, un espectáculo..., ¡ abrumador !.

El desconcierto en el ejercito invasor, se hizo presente, ante aquella sobrecogedora puesta en escena que se les ofrecía frente a ellos, creándoles el pavor y la duda, de si estos..., a los que ahora les tocaban enfrentarse, al verlos blandiendo tales instrumentos, y que sonaban tan amenazadores, serían tan fáciles de vencer como la mayoría de humanos, aquellos a los que masacraron casi sin problemas en el primer ataque al planeta. Estos de ahora, tenían unas armas que parecían ser amenazadoras, a juzgar por sus sonidos, sonidos que les provocaban miedo, sí, por primera vez, estos alienígenas, estas bestias llegadas de otro mundo, tenían miedo, un sentimiento que no habían llegado a sentir jamás. ¿ Quizás porque no se encontraron nunca con esta clase de adversarios y armamento ?, o..., ¿ fue esa clase de música amenazante de rock duro ?, puede que fueran ambas cosas, pero lo cierto es, que en alguna parte profunda de su cerebro, u órgano de procesamiento de la lógica, o lo que quiera que tuvieran para pensar, se les activara ese sentimiento de terror profundo ante lo desconocido. Y esto..., esto fue el desencadenante del declive de estas criaturas, tan avanzadas, y tan potentes en cuanto al dominio mental, siendo precisamente eso lo que les terminó de condenar. El imponente despliegue aparecido ante ellos de esa clase de humanos tan desafiantes, con esos incomprensibles y aterradores sonidos, que les habían llegado a penetrar en lo más profundo de sus privilegiadas mentes, fue lo que originó, que algunos de sus miembros en avanzadilla se dieran la vuelta debido a este nuevo sentimiento de angustia y espanto que se les despertó. Con tal desconcierto, otros que veían como sus congéneres se revolvían hacia atrás, hacia ellos, creyeron que estos, a causa de que los nuevos humanos a los que se enfrentaban ahora, habían conseguido con estas armas nuevas que sonaban, ejercer el control de las mentes sobre ellos, fue entonces, que empezaron a disparar, así, por intuición defensiva, contra los que huían, debido a que creyeron que se rebelaban contra ellos mismos, abducidos por las nuevas armas de estos nuevos humanos que ahora les atacaban. A la vez, los que abandonaban el frente, viendo como les abatían desde sus mismas filas en retaguardia, estos respondían contraatacando. Acaeció entonces lo inesperado y milagroso, porque fue una reacción en cadena, en la que estas bestias, ya se disparaban y arremetían unas contra otras, formándose una gran batalla entre ellos mismos, mientras los humanos avanzaban colina abajo sin dejar de hacer sonar su imponente batallón de rock. Algunos de los transportes voladores de los aliens, que estaban allí apostados, quizás al haber recibido transmisiones contradictorias, echaron a volar abriendo fuego contra sus hordas enfrentadas entre sí, y debido a ello, otras naves, de las que permanecían dando cobertura desde el cielo, empezaron a disparar igualmente contra esas al creerlas manipuladas por los humanos, extendiéndose ahora la batalla en los cielos.

El control y dominio de la mente sobre sus adversarios, que era el arma más potente que tenían estos invasores de mundos, se les volvió en contra, al quedar dicho poder desactivado o intervenido por la fuerte impresión que tales sonidos de rock duro les causaron. Debido a haber recibido esta represalia por primera vez en la historia de ocupaciones de otros planetas, esta horda de alienígenas emprendieron la retirada de aquel planeta azul, al malentender que sus ocupantes poseían la misma capacidad que ellos del dominio sobre la mente de sus adversarios, ese mismo dominio que les sirvió siempre para introducirse en la mente de sus rivales y hacerlos quedar paralizados, y sucumbir a realizar todos los mandatos enviados, incluidos los del suicidio, sí, el poder incubar dentro de la mente de los invadidos la fuerte inducción al suicidio, les hacía letales, provocando en sus asedios a otros planetas la muerte en masa de sus habitantes.

Esta fue, en la lista de sus invasiones, la inauguración de una derrota, incluyendo en sus bases de datos al planeta azul como intocable, para no volver nunca más a él y enfrentarse a esa raza de criaturas que les plantaron batalla en última instancia cuando ya creían dominado ese mundo.

Cómo debieron de ser de impresionantes esos sonidos heavy metal con aquellos personajes caracterizados de otra especie de humano tan amenazador. Esos sonidos penetraron en la psique de aquellos extraterrestres causándoles el efecto de miedo por primera vez en su historia. Creo que escogimos bien el género artístico a esgrimir ante tal amenaza, y no fue por casualidad, un humano llamado..., bueno da igual su nombre, el caso es que descubrió la manera de hacerlo.

Aquella música y cantos heavy metal fueron..., ¡¡¡ sones para vencer !!!.